La ciudad de Toluca tiene características peculiares. Algunas de ellas que (seguramente) no conocías y que muestran la evolución histórica y arquitectónica de la capital del estado de México.

• El nombre original de la ciudad fue Nepitatuhui.

Según las crónicas coloniales, Toluca fue fundada por el pueblo matlazinca hacia el año de 1120 con el nombre de Nepitatuhui, que fue conocida por los náhuatls o aztecas como Tolocan. La región era conocida por los aztecas como el Matlazinco, es decir, donde viven los hombres de la red, en referencia a este instrumento que los pueblos originarios usaban para la pesca y caza.

En la actualidad, el grupo indígena predominante es el otomí, mientras que los matlazincas se ubican en una sola localidad, llamada San Francisco Oxtotilpan, ubicada en el municipio de Temascaltepec. Sin embargo, la familia matlazinca proviene del mismo tronco que los otomíes: el otopame.

• Toluca es la cuarta capital del estado de México.

La ciudad de Toluca fue elevada al título de capital del estado de México en el año de 1830 y 1831, a instancias del tercer gobernador de la entidad, el yucateco Lorenzo de Zavala, quien el 16 de octubre de 1830 decretó el traslado de los poderes de Tlalpan —entonces San Agustín de las Cuevas— a Toluca. Previamente, además de Tlalpan, había sido capital de la entidad mexiquense la ciudad de Texcoco y también la ciudad de México, antes de que se constituyera el régimen federal y la ciudad de México fuera designada parte del Distrito Federal y capital de la república mexicana.

• Los Portales tienen 183 años.

Una vez que Toluca fue capital del estado de México, una de las primeras edificaciones civiles fueron Los Portales, cuya construcción fue emprendida por el comerciante y alcalde José María González Arratia en 1832. Las crónicas indican que fueron concluidos en el año de 1836, aunque el Portal Madero fue construido casi íntegramente por el fraile franciscano Fray Buenaventura Merlín, que fue cura párroco de San José de Toluca entre 1854 y 1890.

• José Alfredo Jiménez se inspiró en Toluca.

En 1954, el compositor José Alfredo Jiménez le dedicó a la capital del estado de México un corrido titulado “Yo soy toluqueño”, que es casi completamente desconocido. La canción hace referencia a las características de los toluqueños, su afinidad al clima frío y a la tranquilidad de su talante: “Nací en el Nevado/ juntitos del lago/ por eso es que el frío/ es mi valedor”.

• El rostro actual del centro de Toluca se debe a Juan Fernández Albarrán.

En el periodo de 1963 a 1969 el toluqueño Juan Fernández Albarrán fue gobernador del estado. En ese periodo, se dio a la tarea de unificar la imagen urbana del centro de la capital mexiquense de la que había sido efímero alcalde 20 años antes —de 1942 a 1943—: las construcciones de los edificios sedes del Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial, además del Teatro Morelos, el edificio administrativo conocido como Plaza Toluca y el palacio municipal adquirieron la característica común de estar recubiertos de tezontle negro y rematados con cantera.